Con la competencia cada vez más fuerte en el mundo fintech, las empresas que lideran son aquellas que entienden que la transformación digital no es solo un proyecto, sino una experiencia. Especialmente cuando hablamos de onboarding digital, el momento en que un cliente decide si confía —o no— en tu producto.
Más del 39% de los usuarios abandona el proceso si es lento o complejo, y el 68% prefiere un flujo 100% online. Esto no es un dato menor: es una señal clara de que el diseño de experiencia (UX) ya no es opcional en procesos críticos como este.
Revisemos cinco recomendaciones que destacan por una razón: convierten la teoría en práctica. Esto es lo que toda fintech debería considerar.
#1 Personaliza según el riesgo
No todas las transacciones tienen el mismo nivel de riesgo. Si estoy transfiriendo millones, espero una validación estricta. Si solo actualizo mi número de teléfono, no debería enfrentar la misma fricción.
La clave está en usar tecnologías como la autenticación biométrica adaptada al contexto. Es decir, un sistema que detecta el tipo de acción y ajusta automáticamente el nivel de verificación.
#2 Elimina el sesgo biométrico
Un sistema de verificación biométrica que no considera la diversidad de usuarios es un riesgo. No solo técnico, también reputacional.
Reducir el sesgo significa combinar señales biométricas con otras fuentes contextuales: comportamiento del dispositivo, historial de transacciones, autenticación multifactor y más.
#3 Apóyate en análisis avanzados
Velocidad y seguridad no deberían estar reñidas. De hecho, las mejores plataformas combinan ambas.
Incorpora análisis predictivos desde el primer momento del flujo. Cruza datos como IP, ID del dispositivo, patrones de clic, KYC («Know Your Customer») y señales de comportamiento en tiempo real. Esto no solo acelera el proceso, también reduce el fraude antes de que ocurra.
#4 Mide los falsos negativos
¿Cómo sabes si tu sistema funciona? Una métrica clave es la tasa de falsos negativos: cuántas identidades falsas se cuelan sin ser detectadas.
Apunta a que ese número sea cero. Y para lograrlo, necesitas modelos de riesgo bien entrenados, testeados y alimentados con datos de calidad.
#5 Refuerza tu flujo con KYC inteligente
Los procesos de Know Your Customer (KYC) son más que un requisito legal. Bien implementados, pueden ser parte de una experiencia positiva.
Incluye elementos como selfies, pruebas de vida, ID de dispositivo y contraseñas dinámicas. Cada paso debe aportar seguridad sin sabotear la experiencia.
Un onboarding bien diseñado no solo impacta en la conversión. Construye confianza, reduce riesgos y fortalece tu marca.
Diseñar pensando en la experiencia, el contexto del usuario y la lógica del negocio es lo que separa a las fintech que escalan de las que se estancan. La UX no se trata solo de estética, se trata de resultados.